Bienvenidos a esta nueva entrega de la campaña Semillas para la Escuela 2023. Como es habitual, la actividad se inició con la venta de 200 calendarios, los cuales muchos de ustedes compraron para poder cumplir con el objetivo propuesto para este nuevo año.
Los útiles escolares fueron comprados en diferentes momentos y nos dimos cuenta que el costo de estos implementos se incrementó con relación a otros años. Esta situación nos puso en alerta, ya que con los recursos que teníamos, no logramos conseguir todo en el momento. Sin embargo, con los útiles escolares donados y el aporte económico realizado por varias personas, se completó lo que nos hacía falta y eso permitió organizar unos buenos kits escolares para ser entregados a los niños y niñas de las escuelas rurales de Anaime en Cajamarca – Tolima.
De forma paralela, en diciembre también se hizo el contacto con Luis Felipe Carranza Rojas, quien es el Director General y Cofundador de la Corporación Vida Andina de Cajamarca, la cual es una entidad dedicada a la conservación de los ecosistemas andinos y quien ha liderado la conservación de la Palma de Cera. Le contamos la idea, notando gran interés y como resultado, aceptó el reto. Entonces, acordamos las fechas y todos los detalles logísticos que hacen parte de la ejecución de la campaña.
Siempre que hacemos la actividad, debemos sortear obstáculos que se presentan en el camino, es por esto que días antes de la ejecución de la campaña, Luis Felipe nos informó que en el Tolima se iba a realizar una asamblea informativa para los profesores de las instituciones educativas, por lo que el viernes 3 de febrero no habría clases. Sin embargo, decidimos mantener la fecha de inicio y el día 2 de febrero llegamos al municipio de Cajamarca.
Ese Jueves nos encontramos con Luis Felipe y Germán (Un amigo de Felipe) en Cajamarca. Entonces, nos dirigimos de una vez a la Institución Educativa la Leona después de pasar por el Centro Poblado de Anaime. Al comienzo la vía estaba pavimentada, sin embargo, llegó el momento de encontrar el polvo y centenares de piedras por todo el camino, a su vez, durante el recorrido pudimos observar muchos campesinos sacando las cargas de arracacha, el principal producto de la zona y además, al ver tanta comida, comprendimos el motivo por el cual, Cajamarca es la despensa agrícola del país.
Llegamos al recinto educativo y descargamos a Batará “la Camioneta” y en un salón, comenzamos a organizar todos los kits escolares, los cuales estaban compuestos por dos cuadernos grandes, regla, plastilina, vinilos, crayolas, colores, cartuchera con lápiz negro, rojo, tijera, pegante, esfero, borrador y tajalápiz. A su vez, algunos kits, tuvieron la fortuna de contar con maleta, ya que también fueron donadas. Sumado a esto, se organizaron los kits para cada una de los profes de cada escuela, los cuales tenían libros, juegos de mesa, marcadores y otros insumos que fuimos entregando según la necesidad de cada plantel.
Cuando terminamos de organizar los 150 kits escolares, en esa misma institución fuimos al salón de los niños y niñas más pequeñas, nos presentamos y comenzaron los juegos, las risas y la algarabía, hasta las profes jugaron con nosotros, mientras Luis Felipe guardaba toda la información en su celular. En esa misma institución, entramos a otro salón, y ahora quien nos recibió fue un profesor con una gran sonrisa y la actividad fue tan contagiosa, que él terminó jugando al ritmo que los niños y niñas ponían en la actividad.
Nos despedimos, y continuamos por la misma vía hasta llegar a la Sede la Siberia. Parecía que no hubiera nadie en el recinto, sin embargo, cuando llegamos a la puerta, todos los niños y niñas estaban muy concentrados en sus actividades. Entonces, ingresamos e hicimos una ronda, entregamos los útiles y nos dimos cuenta que en la pared, tenían fotografías de las aves que llegan a este lugar, les preguntamos los nombres de los alados, y ellos se los sabían hasta en latín, entonces, como el equipo de Raíces Profundas Turismo Ecológico y Cultural tenía el material de “Noches oscuras, migraciones seguras” de la entidad Environment for the Americas. Se los entregamos al profe para que hiciera un taller en otra jornada. Estos elementos cuenta con siluetas de aves elaboradas en papel, los cuales se pueden pegar en las ventanas y esto evita que los pájaros que vienen en migración en las noches, colisionen con los vidrios y así ayudar a su conservación. Nos despedimos y salimos, pero cuando ya estábamos lejos, nos dimos cuenta que se nos había olvidado entregarle a un niño o una niña uno de los calendarios que nos compró una de las personas que apoyó la campaña y quien nos dijo: “Mi calendario, se lo entregan a un niño o una niña de alguna escuela”
En la tarde viajamos por una vía en donde sólo cabía un vehículo, pasamos por un sector de pinos con barbas de viejo y llegamos al Salón comunal de la vereda el Águila, infortunadamente, en esa escuela para esa fecha el profesor no había sido asignado, por lo que Felipe tuvo que acudir al presidente de la Junta de Acción Comunal para la convocatoria, la cual fue todo un éxito. Llegaron los niños y niñas al salón comunal acompañados por sus mamás, y como en todos los lugares, el juego fue la puerta de entrada (Aunque algunas mamás nos miraron como raro) también terminaron jugando. Entregamos los útiles y se fueron caminando, otros a caballo galoparon a casa (para algunos niños y niñas, esa es la ruta escolar)
Los días siguientes, terminamos de organizar los kits escolares, y aprovechamos para conocer diferentes lugares y personas de la zona. Nos dimos a la tarea de conocer emprendimientos de la comunidad y con el fin de impulsar la empleabilidad, a través de actividades turísticas en un futuro. Entonces, recorrimos Anaime, viajamos hasta el cerro volcán Machín, fuimos a observar aves, visitamos algunos restaurantes y no podría faltar la visita al Edén Coffee, una tienda de café llena de aromas, colibríes y con un excelente servicio. También, estuvimos en un bosque de Palmas de Cera observando el Loro Orejiamarillo (Ognorhynchus icterotis) al lado de Neider Esteban Cortés Romero, un joven fotógrafo de la región y quien fue seleccionado para participar en la exposición FOTAZO en el museo de Arte del Tolima.
Llegó el lunes y madrugamos para terminar con la entrega de los útiles. Por la vía encontramos que la agricultura está acelerada y recordamos que en el año 2017, Cajamarca realizó una consulta popular para frenar la minería en su municipio, con más del 97%, los habitantes le dijeron NO al extractivismo. Sin embargo, al pasar por la vía se puede observar como los monocultivos generados por otras multinacionales dedicadas a la producción de aguacate han logrado generar mayores presiones a la biodiversidad del lugar. Llegamos hasta la escuela más lejana en la vereda Potosí, en la falda de una montaña la cual estaba adornada por uno de los bosques de palma de cera más antiguos del país, aquí, los niños y niñas nos recibieron con los brazos abiertos, salimos a la cancha a jugar. Entregamos los kits escolares empacados en maletas. La profe, quien vive en la escuela nos ofreció un rico tinto y le entregamos los libros y un bafle solar. Al finalizar un niño se acercó y nos dijo ¿Jugamos un partido? entonces hicimos unos tiros al arco y finalizamos con la siembra de tres palmas de cera, ya que Felipe las donó a la escuela y también en agradecimiento a todas las personas que apoyaron la campaña, es decir a todos ustedes.
Bajamos a la escuela la Cucuana, en la que no estaban todos los niños y niñas, pero al igual de todas las demás escuelas, jugamos con los que estaban estudiando y finalmente, llegamos la escuela Ródano, en donde ese día en particular, los niños no llegaron a clases, y sólo estuvimos con dos de ellos. La última escuela, no logramos visitarla, ya que el profesor tuvo una situación con su rodilla y estaba incapacitado, entonces, Felipe se comprometió a llevar los útiles escolares, pero el profesor, aún esta incapacitado.
Un momento… ¿Recuerdan que habíamos olvidado entregar un calendario en la escuela la Siberia, el lugar en donde los niños y niñas tienen pegados en la pared las aves que llegan a la institución? Pues pasamos por el lugar y cuando entramos, con gran sorpresa el profe había realizado el taller de Noches Oscuras, migraciones seguras, hasta pintaron e hicieron las máscaras, entonces, qué mejor lugar en el que se quedó el último calendario, se lo entregamos a una niña, quien según el profe, fue quien más disfrutó del taller.
Finalmente, descendimos por el camino lleno de polvo, mucho polvo. Como siempre en esta actividad, la nostalgia se enmascara con el silencio. Nos despedimos de Anaime con sentimientos encontrados, esta tierra es completamente rica gracias a sus suelos abonados por el volcán cerro Machín hace 800 años. Quedaron en esa nube de polvo, las risas, los juegos, los rostros de los niños y niñas al ver los útiles nuevos, las maletas, la siembra de las palmas de cera y todas las demás experiencias que se vivieron con esta actividad. Muchas gracias a la Corporación Vida Andina y a su representante Luis Felipe Carranza Rojas, por la gestión realizada con la rectora de la Institución Educativa la Leona y cada uno de los profesores y profesoras que nos permitieron interrumpir sus clases para darnos el espacio y compartir con los niños y niñas. Muchas gracias a todos ustedes por ayudarnos a contribuir con la transformación de la educación del país por un año escolar, con la compra de los calendarios, la donación de útiles escolares o por haber realizado aportes económicos para comprar lo que faltaba. Todo este apoyo nos permitió llegar a este lugar mágico, el cual produce algunos de los productos alimenticios que llegan a nuestras mesas y que posee uno de los paisajes más antiguos con los que cuenta el país, el bosque de la Palma de Cera (Ceroxylon quindiuense) el árbol nacional de Colombia y el cual es el hogar de nuestro querido loro orejiamarillo (Ognorhynchus icterotys) y de otras aves.
No te vayas sin escuchar un pequeño audio…